Cuando se cumplía el primer centenario de la famosa Carta a Garcia, conocida en 1899, los autores de esta compilación decidieron incorporar a este pasaje original otra serie de anécdotas, fabulas y parábolas que apoyan el estilo alegórico de enseñanza que aquel texto de Hubbard ofrecía.
Del mismo modo nos propusimos como objetivo poner en la mano de los educadores, de los consultores, de los profesores universitarios, de los comunicadores sociales, de los gerentes y agentes de cambio, unas nuevas herramientas de reflexión que estimulen la meditación individual, las discusiones y debates proactivos tomando la ruta del autoaprendizaje colectivo.
En estos tiempos en los que todos nos quejamos de la pérdida de valores, reeducar en ellos no parece una tarea fácil. En primer lugar, porque los valores son un marco de referencia absolutamente personal, fruto de todas mis influencias, mis vivencias y las validaciones que en mi vida he hecho sobre ellos. En segundo lugar, porque en materia de valores es imposible contar con el consenso total. En el mejor de los casos podemos llegar a un acuerdo alrededor de lo que hoy se conoce como la "ética de mínimos", es decir, un marco de valores compartidos por un grupo, una comunidad o una parte de la sociedad, y con los cuales estamos de acuerdo para comprometernos con ellos: tal es el caso general de las declaraciones de misiones y valores organizacionales.
La verdad es que hemos sido poco eficaces en la reeducación sobre valores a través de sermones, discursos, prescripciones o memorandos: los valores no los incorporamos a nuestra consciencia a través de la prédica. Los antivalores en cambio suelen llegar por otras vías de comunicación en esta época de redes sociales. Por ello creemos necesario despertar en los lectores -- niños, adultos, jóvenes, viejos-- un interés menos abstracto, y más simbólico, acerca de los valores que se diseminan en nuestra sociedad de tal manera que a través del debate, de la analogía, de los ejemplos de otros, cada uno realice una lectura personal.
Ese es precisamente nuestro objetivo: a través de escritos cortos, de fácil lectura y de comprensión para cualquier persona, permitir que una reflexión sencilla los lleve a sacar conclusiones interesantes, prácticas y vinculadas con su propia vida. Estos pensamientos pueden estar relacionados con su vida familiar, laboral o social, pero también pueden servir de manera silenciosa para repensar la realidad en la que vivimos, o darle la oportunidad a un grupo o a una organización de discutir sobre distintos temas y llegar a acuerdos e ideas compartidas sobre los temas que tratamos en este libro.
La idea de una antología nos pareció provechosa y por ello hemos decidido reunir ese conjunto de textos, extractados de libros, traducidos de revistas o del Internet, recopilados por amigos entusiastas que quisieron colaborar con nosotros, y muchos otros relatos que hemos venido utilizando en años de entrenamiento y capacitación, incluyendo los aportes del libro de Jaime, Memos para la Gerencia, publicado por Cesa/Incolda en 1994. No sobra decir que los méritos de esta publicación son de sus autores originales (trataremos de dejar constancia de lo que sea posible en las referencias bibliográficas que aparecen en cada nota), no obstante, si algún merecimiento nos cabe es el de haber servido como multiplicadores de sus lecciones.
